Qué hacer con las facturas recibidas sin IVA

Oct 7, 2025 | Blog

Las facturas recibidas sin IVA pueden generar muchas dudas, especialmente entre autónomos y pequeñas empresas.

¿Es un error del proveedor? ¿Se trata de una operación exenta? ¿Debo corregirla o aceptarla tal cual?

La respuesta no siempre es sencilla, ya que no todas las facturas recibidas sin IVA son incorrectas.

En algunos casos, están perfectamente justificadas por la normativa fiscal española.

Sin embargo, en otros, puede tratarse de un fallo que conviene subsanar antes de contabilizarla.

En este artículo, analizamos en detalle qué hacer con las facturas recibidas sin IVA, cuándo son correctas, cómo tratarlas contablemente y qué pasos seguir si detectas un error.

 

El IVA y su papel en las facturas recibidas. Facturas sin IVA

El Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) es un tributo indirecto que grava el consumo.

Cada factura emitida por un profesional o empresa debe incluir, en principio, el tipo de IVA correspondiente (21%, 10% o 4%).

Cuando una empresa recibe una factura con IVA, ese importe se considera IVA soportado, y puede deducirse en la declaración trimestral (modelo 303), siempre que la factura cumpla con los requisitos legales.

Sin embargo, no todas las operaciones están sujetas o gravadas con este impuesto, lo que da lugar a las facturas sin IVA, que pueden ser perfectamente válidas según la ley.

 

¿Por qué hay facturas recibidas sin IVA?

Existen varias razones legales por las que puedes recibir una factura sin IVA. Vamos a ver los principales casos en los que esto es totalmente normal:

Operaciones exentas de IVA

Algunas actividades están exentas de IVA según la Ley 37/1992 del IVA.

Por ejemplo:

  • Servicios médicos y sanitarios.
  • Actividades de enseñanza reglada o formación privada.
  • Arrendamientos de viviendas.
  • Operaciones financieras y de seguros.

En estos casos, la factura debe incluir una mención clara, como:

“Operación exenta de IVA según el artículo 20 de la Ley 37/1992.”

 

Facturas intracomunitarias. Facturas recibidas sin IVA

Si tu proveedor está en otro país de la Unión Europea, puede emitirte una factura sin IVA bajo el régimen de inversión del sujeto pasivo.

En este caso, eres tú quien debe autorepercutirse el IVA en tu declaración (modelo 303).

Esto significa que:

  • Añades el IVA como “repercutido” y lo declaras como si lo hubieras cobrado.
  • Al mismo tiempo, lo incluyes como “soportado”, de forma que el efecto económico sea neutro.
  • La factura debe incluir una mención como:
  • “Operación intracomunitaria. Inversión del sujeto pasivo según artículo 84.1.2º de la Ley del IVA.”

 

Facturas de profesionales acogidos al régimen de recargo de equivalencia

Si tú eres comerciante minorista bajo recargo de equivalencia, tus proveedores te emitirán facturas sin IVA desglosado (aunque el impuesto esté incluido en el precio final).

El proveedor debe aplicar el recargo correspondiente (5,2%, 1,4% o 0,5% según el tipo de IVA), y tú no puedes deducirte ese IVA, ya que lo pagas de forma indirecta.

 

Facturas emitidas por autónomos en régimen especial

Algunos autónomos tributan en régimen especial y no repercuten IVA:

  • Agricultores y ganaderos en régimen especial agrario.
  • Pequeños transportistas bajo módulos con régimen simplificado.

Estas facturas también pueden llegar sin IVA y ser completamente válidas.

 

Exportaciones o entregas fuera de la UE. facturas recibidas sin IVA

Las operaciones con clientes o proveedores fuera de la Unión Europea están exentas de IVA.

Por tanto, si importas un producto o servicio de un país extracomunitario, la factura puede venir sin IVA, aunque luego debas liquidar el impuesto correspondiente mediante aduanas o declaración de importación.

 

Facturas rectificativas o de abono

Cuando se corrige una factura anterior (por error, descuento, devolución, etc.), el proveedor puede emitir una factura rectificativa sin IVA si la operación original también estaba exenta o anulada.

 

Cuándo una factura sin IVA no es correcta. Facturas recibidas sin IVA

No todas las facturas recibidas sin IVA son válidas.

A veces, simplemente el proveedor ha cometido un error.

Debes sospechar si:

  • Se trata de una venta nacional y el proveedor no ha indicado ninguna exención.
  • La actividad no pertenece a un sector exento.
  • La factura no incluye mención alguna a la normativa de exención.

En estos casos, la factura debe corregirse antes de contabilizarla. Si no lo haces, podrías tener problemas al justificar el gasto ante Hacienda.

 

Qué hacer cuando una factura sin IVA no es correcta. Facturas recibidas sin IVA

Si detectas que has recibido una factura sin IVA por error, sigue estos pasos:

Contacta con el proveedor

Indícale que el documento no cumple la normativa y pídele que emita una factura rectificativa con el IVA correcto.

 

No contabilices ni declares la factura original

Esperar la rectificación evita errores en la contabilidad y en el modelo 303.

 

Guarda ambas versiones

Conserva tanto la factura errónea como la rectificativa, para demostrar ante Hacienda que la operación fue corregida correctamente.

 

Cómo registrar una factura sin IVA en la contabilidad. Facturas recibidas sin IVA

Cuando una factura sin IVA es correcta, debes contabilizarla según el tipo de operación:

Tipo de operaciónTratamiento contableModelo a declarar
Exenta de IVA (art. 20 Ley 37/1992)Gasto normal sin IVAModelo 303 (sin IVA soportado)
Intracomunitaria (UE)Autorrepercusión de IVA (soportado y repercutido)Modelos 303 y 349
Exportación / importación fuera UEIVA liquidado en aduanaModelo 303
Recargo de equivalenciaIVA incluido en precio (no deducible)Modelo 303 (no se deduce)

 

En plataformas como Facturalia, puedes seleccionar el tipo de operación y el sistema generará automáticamente el asiento contable y la integración con el modelo correspondiente.

 

Qué pasa si ya la has declarado mal

Si por error has contabilizado una factura recibida sin IVA como si tuviera impuesto, o al revés, no te preocupes: tiene solución.

  • Localiza el error y revisa el trimestre afectado.
  • Emite un asiento de corrección contable o usa una factura rectificativa del proveedor.
  • Presenta una declaración complementaria del modelo 303 si ya habías enviado la liquidación a Hacienda.
  • Rectificar a tiempo evita sanciones o recargos innecesarios.

 

Deducción del gasto sin IVA. Facturas recibidas sin IVA

Aunque una factura no lleve IVA, puede deducirse como gasto, siempre que:

  • Esté vinculada a la actividad económica.
  • Cumpla los requisitos formales (identificación, descripción, numeración, fecha, etc.).
  • Se contabilice correctamente en los libros de gastos.

 

Es decir, el hecho de que no tenga IVA no impide que sea un gasto fiscalmente deducible.

 

Errores comunes con facturas sin IVA

Al gestionar facturas recibidas sin IVA, hay ciertos errores frecuentes que conviene evitar:

  • No comprobar la causa de la exención. Siempre debe indicarse el artículo o motivo legal.
  • Incluir IVA por error. Si la factura no lleva IVA porque está exenta, no debes añadirlo tú.
  • No aplicar la inversión del sujeto pasivo. En operaciones intracomunitarias, eres tú quien declara el IVA.
  • Deducir IVA inexistente. Si no hay IVA en la factura, no puedes incluirlo como soportado.
  • No conservar la documentación justificativa. Guarda correos, contratos o albaranes que acrediten la naturaleza de la operación.

 

Cómo automatizar la gestión con Facturalia de las facturas recibidas sin IVA

Una forma sencilla de evitar errores es utilizar software de facturación que te ayude a identificar cuándo una factura lleva o no IVA.

Con Facturalia, por ejemplo:

Puedes registrar facturas recibidas sin IVA indicando el motivo (exenta, intracomunitaria, recargo de equivalencia, etc.).

El sistema clasifica automáticamente las operaciones y las refleja correctamente en los modelos 303 y 349.

Te avisa si falta alguna mención legal obligatoria.

Así evitas errores de contabilización y cumples siempre con la normativa vigente.

 

Conclusión Qué hacer con las facturas recibidas sin IVA

Recibir facturas sin IVA no siempre es motivo de alarma.

En muchos casos son operaciones legítimas —como exentas, intracomunitarias o sujetas a regímenes especiales— y deben tratarse de forma adecuada según su naturaleza.

La clave está en:

  • Identificar el motivo por el que la factura no lleva IVA.
  • Verificar que incluye la mención legal correspondiente.
  • Contabilizarla correctamente en función de su tipo de operación.
  • Solicitar corrección si detectas un error.

Con un buen control de tus facturas y el apoyo de herramientas como Facturalia, podrás gestionar estas situaciones con seguridad, transparencia y sin perder deducciones.